El artículo documenta el fracaso de la seguridad social en México como instrumento de protección social y evalúa posibles estrategias de reforma. Se analiza la cobertura truncada para la población más vulnerable, la incidencia regresiva y desigualdades horizontales de los subsidios públicos a la seguridad social, y las consecuencias para la pobreza en adultos mayores y la desigualdad en oportunidades básicas de salud. Se consideran reformas para transitar del sistema polarizado vigente a un sistema de protección básica universal, y se estiman los costos e incidencia de beneficios netos de una pensión y un seguro de salud universales. Se propone transitar de un modelo centrado en un componente contributivo obligatorio (pilar 2) de beneficios amplios y cobertura limitada, a uno centrado en un componente básico, no contributivo e universal (pilar 1), complementado por un componente contributivo voluntario (pilar 3).