En el documento se hace un análisis sobre que cada país tiene necesidades diferentes en materia de salud, y por lo tanto, sus gastos fluctuan según lo que cada uno quiera destinar para cubrir estas necesidades, hasta alcanzar un nivel sanitario adecuado. Destaca que en los país de América Latina, que se encuentran en pleno proceso de evolución económica, los salarios son bajos, y que son elevados los gastos de saneamiento, lucha contra enfermedades transmisibles y mortalidad infantil, por lo que el campo de aplicación de la seguridad social se extiende constantemente, y en consecuencia, el número de personas que debe atender el seguro de enfermedad es cada vez mayor, en circunstancia que los ingresos que estos nuevos grupos de población aportan no son siempre suficientes para sufragar los gastos que demanda su atención médica (cotización sobre salarios bajos que deben mantener tratamientos costosos).