La juventud es una etapa clave del ciclo de vida, en la que se definen aspectos que marcarán la vida adulta, entre ellos la inclusión en el mercado laboral. Sin embargo, en América Latina y el Caribe, tanto por los problemas estructurales de desigualdad y pobreza como por las consecuencias de la pandemia de enfermedad por coronavirus (COVID-19), la inclusión de las personas jóvenes, y en particular de las mujeres jóvenes, en la educación y el trabajo decente está en riesgo. Frente a esta compleja situación, en este estudio se analizan alternativas de política pública para la mejor inclusión laboral de las personas jóvenes y el desarrollo de sus capacidades y potencialidades. Se analiza, además, el potencial de los programas de inclusión laboral y productiva orientados a la juventud, así como de acciones complementarias como la entrega de transferencias monetarias y la provisión de servicios de cuidado. (AU)