La desigualdad social que provoca la economía de mercado, dificulta a la ciudadanía acceder a bienes y servicios que permitan la satisfacción de necesidades, lo cual se agrava frente a determinadas circunstancias de naturaleza económica, social o biológica que condicionan el bienestar. Ante ello, Argentina ha instituido un Régimen de Seguridad Social traducido en una serie de prestaciones que constituyen herramientas de Política Pública con el objetivo de atender todas aquellas contingencias que aquejan a la sociedad siguiendo criterios de justicia social. (AU)