Los cambios en la política económica mexicana dentro del neoliberalismo implicaron serias transformaciones en las relaciones y formas de organización laboral. Con base a esto, el objetivo de este artículo es analizar las implicaciones que tuvieron en la organización de los trabajadores la aplicación de prácticas como los contratos de protección y la subcontratación, y las posteriores reformas laborales, todavía limitadas, que posibilitan nuevos esquemas de dinamización dentro de los sindicatos, mediante nuevas reivindicaciones enmarcadas dentro de los derechos de ciudadanía laboral. Metodológicamente se hace una descripción sucinta sobre los principales cambios en la economía mexicana y el contexto laboral a partir de la última década del siglo pasado y las dos primeras del presente siglo. Esto se vincula con los elementos conceptuales de la centralidad de trabajo y ciudadanía laboral. Se concluye señalando que las reformas laborales posibilitan nuevos escenarios de oportunidad del sindicalismo mexicano. (AU)