Antecedentes: A partir de la década de los ochenta los mercados laborales han quedado definidos por la precariedad del empleo, lo que puede tener como resultado graves consecuencias para la salud de los trabajadores, a pesar de ello la evidencia para México es limitada.
Objetivo: Analizar la relación entre la precariedad laboral y las condiciones de salud de los trabajadores en México en el año 2018.
Métodos: La fuente de información utilizada fue la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018. La metodología que se utilizó tuvo dos etapas, inicialmente un Análisis por Conglomerados (AC) para cuantificar la precariedad laboral en tres niveles, posteriormente un modelo de regresión logística multinomial para conocer la relación entre esos niveles de precariedad laboral y las condiciones de salud de los trabajadores.
Resultados: El 75 % de los trabajadores asalariados tienen un nivel de precariedad alto o medio, con problemas de depresión (12.5%) y cardiovasculares (2.1%). El nivel de precariedad se relacionó con alcohol, tabaco y depresión
Conclusiones: Los trabajadores con precariedad media o alta tienen más posibilidades de consumir alcohol y tabaco que los de precariedad baja, en lo que respecta a los síntomas depresivos se presenta una relación negativa que indica una reducción de la probabilidad de que un trabajador con precariedad media tiene menos posibilidades de tener síntomas depresivos que un trabajador de precariedad baja. (AU)