Para la construcción de tablas actuariales, se aplicó una metodología no paramétrica que considera la secuencia observada de los datos originales de fallecidos y expuestos que intervienen en la estimación de la tasas brutas de mortalidad. Primero, se desarrolló la fórmula original de Wittaker-Henderson Tipo B; posteriormente, se estudiaron los aportes de Howard L. Weinert y Walter B. Lowrie. La fórmula original considera la graduación de los datos originales y es vista como un método de doble objetivo. Por un lado, los resultados de la graduación deben estar cerca de los datos originales (mayor ajuste) y por otra parte, deben presentar patrones de mayor suavizamiento. El propósito es encontrar un balance entre a) la suma al cuadrado de las desviaciones entre los valores observados y los ajustados y b) la suma de las diferencias finitas al cuadrado de los valores ajustados de un orden que se elija, generalmente de orden 2 ó 3. Al final, lo que se busca es una curva ajustada y suavizada lo más cercano posible a los valores originales que permitan explicar las probabilidades de fallecimiento. Sobre la base del estudio realizado, se concluyó que la metodología de Weinert realiza aportes eficientes y prácticos a la metodología original. Al combinar esos métodos se generó un modelo que gradúa la tasa bruta de mortalidad utilizando matrices; adicionalmente, se desarrolló un sistema de ecuaciones que vuelven más eficiente el proceso de graduación y con mayor rigurosidad técnica actuarial. Derivado de ello se concluye que la metodología de graduación de Wittaker-Henderson-Weinert Tipo B, puede aplicarse en El Salvador para los fines de construir tablas actuariales.